El entrenador principal del "Dynamo", Marcel Lichka, respondió a las preguntas de los periodistas después del partido ganado contra el "Sochi" (3:2).
— Queríamos mucho ganar y lo logramos. El final fue muy nervioso. Les agradecí a los chicos por su actitud hacia el juego. Siempre es difícil salir al campo después de dos partidos como los que tuvimos contra el "Zenit" y el "Spartak" y enfrentarse al último equipo de la tabla con la actitud correcta. En la primera mitad jugamos bien, nos esforzamos, tuvimos 3-4 excelentes oportunidades, pero desafortunadamente no anotamos. Comenzamos la segunda mitad con un gol muy hermoso. Lo que hicieron Parsh y Tyuk fue fantástico. Destaco la excelente coordinación de Kostya en la zona donde no tienes tiempo para pensar, eso es fantasía y habilidad.
Luego comenzamos a luchar contra nosotros mismos. Quedaban 35 minutos de juego y empezaron a surgir pensamientos sobre cómo mantener el marcador y no cometer errores, lo que sucedió. Afortunadamente, reaccionamos rápidamente y anotamos el segundo gol, y cuando fue necesario, también el tercero. El resultado es excelente, pero creo que los chicos merecían una victoria más convincente.
— ¿De alguna manera pudiste influir en la situación cuando el marcador estaba 2:1 y el equipo estaba presionando?
— Por supuesto, pensé en cómo ayudar al equipo. Hice entrar a Marichal en lugar de Chaves, esperando centros altos en el área y jugadas a balón parado. Además, recibimos el primer gol después de un centro así. Pero es difícil encontrar un error en el segundo gol que recibimos cuando el oponente logra tal disparo.
— ¿Entiendes que en los partidos restantes probablemente no habrá más regalos y no se puede desperdiciar tantas oportunidades como en la primera mitad?
— "Sochi" cambió su filosofía de juego: no tienen miedo de actuar bajo presión y salir de ella. En el vestuario les dije a los chicos que si queremos tener éxito, tenemos que jugar a cero atrás, y Tyuk tiene que aprovechar su oportunidad. En estos últimos partidos, si tengo que elegir entre jugar un fútbol hermoso pero sin victoria, o ganar con un fútbol no tan bueno, elegiré la segunda opción.
Estoy muy contento de que Parshivlyuk y Dasa dieran cada uno una asistencia y ayudaran al equipo. Mumi entró como sustituto y anotó un gol muy importante. Dije que necesitamos mantener ese espíritu de equipo y aguantar las últimas tres semanas. Quedan tres partidos difíciles y necesitamos intentar jugarlos lo mejor posible.
— Ustedes pusieron en la portería a Igor Leshchuk, quien salvó al equipo dos veces. ¿Por qué decidieron ponerlo?
— Anton jugó 6 partidos seguidos, y después de hablar con el entrenador de porteros, decidimos que era un buen momento para darle una oportunidad a Igor. Fue una prueba para él, para ver si podía rendir bien después de los errores cometidos. Hoy ayudó al equipo, jugó bien. En el segundo tiempo, Anton comenzó a calentar cuando Igor empezó a sentir dolor en el músculo aductor. Afortunadamente, pudo aguantar hasta el final.
— Después del partido con el "Zenit" parecía que el equipo había agotado todas sus emociones. Hoy la fortuna les devolvió esas emociones al final del partido. ¿Tienen alguna preparación en términos de recuperación de la fuerza emocional?
— La mejor manera es darles a los jugadores un día de descanso para que tengan la oportunidad de cambiar el ambiente en sus cabezas durante 24 horas. Porque ahora los juegos son uno tras otro, y personalmente para mí es genial cuando llegas al estadio y te nutres de las emociones de los aficionados. Entrenar no está mal, pero no se obtienen las mismas emociones que hoy, y en un calendario tan apretado no es fácil motivarse. Hoy esas emociones llegaron al final del juego. Estoy contento de que los futbolistas lucharon hasta el final y trataron de seguirlas. Cuando te marcan en el minuto 90, puede matarte, pero el equipo creía que todavía había una oportunidad de arrancar la victoria, y lo lograron.
